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La experiencia fue increíble: eran mis segundos
JEM pero los primeros junto a “Carriem van Colen Z”,
con quien además debutaba en el nivel 4*. “Carriem”
es un caballo increíble, probablemente el mejor que
he tenido hasta el momento. No sé bien cómo resu-
mir la experiencia, porque cada día y cada momento
de cada uno de los días tenía algo especial: compartir
escenario con compañeros españoles de otras disci-
plinas es alucinante, conoces nuevos métodos de tra-
bajo y entrenamiento, nuevas ideas, nuevas perspec-
tivas, todos juntos, una piña española increíble y ami-
gos que te ayudan en todo momento con la mayor de
las gratitudes. En primer lugar, pude conocer con
mayor cercanía a los integrantes del equipo de Doma
Clásica, sobre todo a Beatriz Ferrer-Salat, mi gran
ídolo desde que tengo consciencia ecuestre. Pero
también los chicos, Claudio, Juan y Severo, que nos
apoyaron durante todo el concurso. Asímismo, el ve-
terinario que viajaba con el equipo de Doma, Gaspar
Castelijns, nos ayudó a recuperar los caballos tras la
horrible cuarentena que tuvieron que pasar; los herra-
dores David Canes y Edo Marés revisaron las herra-
duras de todo el equipo y se mostraron más que ca-
riñosos y colaborativos en todo momento; Gabrielle
Horricks-Webb, la excelente fisioterapeuta de los ca-
ballos de nuestra “súper Bea”, también pasó sus ma-
nos por todos los caballos de CCE, garantizando con
“Qing du Briot Ene HH”, montado por el Tte. Col.
Thiabut Vallette, realizó la 4ª mejor doma.