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J A N A D E C AVA I GN A C
la gran labor de AECCAá está generando bastante público, aún nos queda mucho trabajo, pero creo que estamos bien
encaminados...
¿Cree que fue justa la puntuación en la prueba de Doma en Lion d’Angers?
Sí, totalmente de acuerdo, soy consciente de lo que pasó en cada movimiento, los jueces estuvieron acertados. Al
igual que en Pineda reconozco el buen papel que hicimos (aunque mejorable), en Lion reconozco que no estuvimos en nues-
tro mejor momento, totalmente merecida.
Terminar el Cross en ‘Cero’ en el tiempo. Muchos eliminados... ¿Ahí pensó que “Jana” volvía a ser ‘su’ “Jana
de Cavaignac”?
He de reconocer que dudé un poco de ella y no me arrepiento, ya que posiblemente pensar así fue detonante para
terminar con un ‘clear round’ en Cross Country, creo que hicimos un recorrido con cabeza y sin arriesgar, de camino al últi-
mo salto estaba eufórico.
¿Cuándo se dio cuenta de que se había hecho un corte? Puede contarnos su versión de los hechos.
La euforia poco me duró, según bajé de la yegua y mientras estábamos refrescándola, Isabel, que tanto me ayudó,
se dio cuenta del corte en el pecho. Cuando lo vi se me echó el mundo encima, sabía lo que iba a pasar y no me lo podía
creer; según llegó a la cuadra el veterinario del concurso nos atendió, tuvieron que coserla, pregunté sobre la posibilidad de
seguir en la competición y éstas fueron sus palabras: ‘If you really want all the best for your mare, please don’t try to jump
tomorrow with her”. Lo mejor para la yegua era que no saltara porque la herida podría abrirse y el resultado podría ser aún
peor, decidimos no arriesgar y a duras penas decidimos no seguir en el concurso, ahí acabo todo.
El Mundial puso a prueba su capacidad de sufrir. Abajo-arriba-de nuevo abajo... ¿Cómo está su moral al regreso?
Las buenas palabras del ‘owner’ son condicionantes a la hora de levantarte el ánimo, yo las eché de menos. Pero
hay que saber que en este deporte estas cosas pasan, que es un juego de dos y la suerte influye, hay que saber levantarse,
no es la primera ni va a ser la última... todo sirve como experiencia.
¿Nos puede anticipar el futuro inmediato de la yegua?
El futuro inmediato de la yegua es pasarse las próximas 3-4 semanas de recuperación en nuestro prado, luego em-
pezaré a trabajarla de nuevo y deseo que se quede en casa.
LOS ORÍGENES
Si dos sementales han marcado la cría de caballos Anglo-árabes de deporte en España durante casi treinta años, sin
duda, han sido “Aligoté” 1961 y “Daritchou” 1969. Ambos franceses de origen, alazanes los dos, y también su destino fue pa-
recido, ya que sirvieron en los depósitos de sementales de buena parte de España repartiendo su calidad genética por allí
donde ‘pasaron’. La lógica geográfica hizo que aquellos criadores que tuvieron la suerte de estar en el lugar adecuado en cada
momento justo (en estos años 70 y 80 la monta natural era el único método de cubrición empleado en España) pudieron tener
caballos en cuya genética figuraran ambos reproductores. Generalmente, por cronología, madres y nietas de “Aligoté” se cru-
zaron con “Daritchou”, aunque más adelante también hijos de “Aligoté” cubrieron yeguas descendientes de “Daritchou”.
Ya hemos hablado de estos dos sementales y su descendencia en repetidas ocasiones en esta misma Revista, y es-
pecialmente a raíz de la calidad de “Garitchou”, propio hermano de “Daritchou”, semental, que de haber tenido mayor des-
cendencia, hoy podría considerarse Jefe de Raza en Europa.
En la Gran Semana Anglo-árabe varios han sido los caballos y yeguas que en su genealogía muestran
aquello a lo que nos referimos aquí, y entre ellos la multigalardonada “Jana de Cavaignac”, hija de “Ultra de Gue”
y “Zorita” por “Carnaval”.
“DARITCHOU”.
“ALIGOTÉ”.