De acuerdo al Reglamento del Ciclo de Pruebas de Selección de Caballos Jóvenes de CCE, para optar a la Final se exige, al menos, haber realizado un mínimo de dos pruebas clasificatorias con una penalización menor o igual a 79,7 puntos, al menos una de ellas en el segundo período, o bien clasificar en tres pruebas. Se podrán modificar estos criterios ante determinadas circunstancias que así lo aconsejen. Como también indica el Reglamento, se podrán modificar estos criterios ante determinadas circunstancias que así lo aconsejen.
En base a lo anterior, la Subdirección General de Medios de Producción Ganaderos del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a propuesta de AECCAá, ha autorizado el establecimiento de unas condiciones extraordinarias de acceso a la Final para el presente año.
En este sentido, debido a la reducción del número de pruebas, 14 en 2007 hasta llegar a 4, (sólo 3 en el caso de caballos de 7 años), así como a la mayor exigencia y dificultad técnica de las mismas, y atendiendo de manera especial a la demanda de jinetes y propietarios de caballos participantes, al igual que el pasado año, se modifican de forma extraordinaria las condiciones de participación en la Final del Ciclo de PSCJ de CCE 2013, a celebrar en el Real Club Pineda de Sevilla, siendo de la forma siguiente:
- Que puedan acceder a la Final aquellos caballos de siete años que por diversas circunstancias no hayan superado ese nivel exigido, y sin embargo superen (máx. 79.7 puntos) la prueba de la segunda fase, en Dos Hermanas, el 6-7 de julio.
- Asimismo caballos de cualquier grupo de edad que tengan superada una prueba clasificatoria, se les permita una penalización máxima de 90 puntos en la prueba de la segunda fase.
- Y también aquellos que en la clasificatoria de la segunda fase obtengan una penalización máxima de 70 puntos aunque no tengan clasificación en la primera.
De esta manera se conseguirá que a la Final asistan aquellos binomios que estén con un nivel de preparación adecuado a su grupo de edad en mayor número. De lo contrario, dejarían de asistir caballos con sobradas aptitudes que, por las circunstancias expuestas u otras de similares características, no alcanzarían la clasificación.